Policías y manifestantes se acusaron mutuamente este jueves de actos violentos registrados durante una manifestación a favor de un alto el fuego en Gaza, celebrada el miércoles por la noche ante la sede nacional del Partido Demócrata en Washington.
Según las asociaciones que organizaron la protesta, la policía propinó puñetazos y roció con gas pimienta a los asistentes «a los pocos minutos» de su llegada. Como consecuencia, 90 manifestantes resultaron heridos leves y uno sufrió una conmoción cerebral, afirmaron en rueda de prensa.
La policía informó por su parte de seis heridos entre sus filas por «pequeños cortes», «puñetazos» o irritaciones relacionadas con el «gas pimienta».
«Hemos gestionado cientos de manifestaciones pacíficas, pero la de anoche no fue pacífica», afirmó este jueves la policía del Capitolio en un comunicado.
En un comunicado añade que el grupo desplazó contenedores de basura y roció a los agentes con gas pimienta durante la protesta, que se saldó con un manifestante de 24 años detenido. Los organizadores de la manifestación niegan las acusaciones.
El tumulto obligó a cerrar las oficinas cercanas del Congreso.
Los congresistas que se encontraban en el interior del edificio afirman que tuvieron que ser «rescatados» por la policía.
Los manifestantes «bloquearon todos los accesos de entrada y salida», contó el legislador demócrata Sean Casten en X, antes conocido como Twitter.
«Bloquear todas las entradas a un edificio con varios miembros del Congreso en su interior, protegidos por agentes de la policía del Capitolio que han vivido el 6 de enero es ponerles en peligro a ustedes y a otras personas inocentes», afirmó, en referencia al ataque de 2021 al Congreso por parte de simpatizantes del expresidente republicano Donald Trump.
Jessica Rosenberg, rabina del grupo Voz Judía por la Paz, miembro de la coalición que convocó la protesta, sostiene que los manifestantes bloquearon todas las entradas menos una «para que la gente entrara y saliera del edificio y poder hablar con ellos».
La policía afirma haber reaccionado «sacando a la gente del edificio, haciéndola retroceder y desalojándola de la zona» para evacuar a los congresistas y al personal del edificio.
La guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás ha provocado manifestaciones en todo el mundo.