Uno de los grandes misterios que rodea a la investigación especial es esa vieja historia que dice que, algún día, la Luna chocará contra la Tierra. Para aclarar esa teoría, expertos de la NASA explican si ese evento ocurrirá o no.
Como explica el informe publicado en el sitio web de Nat Geo en Español, el Sistema Solar ha conservado un equilibrio entre los cuerpos solares que lo conforman, lo que ha promovido que los planetas y sus satélites no colisionen entre sí.
La anterior es la razón por la que los científicos de la agencia espacial estadounidense no sienten preocupación por la idea de que nuestro satélite natural choque contra el planeta. Sin embargo, la posibilidad existe, aunque es una probabilidad remota.
Es posible, pero poco probable
Tony Cook, profesor de física en la Universidad de Aberystwyth, asegura que la Luna no corre ningún peligro de impactar repentinamente con la Tierra: “Hay un equilibrio entre la Tierra y la Luna. Es un punto de equilibrio llamado baricentro y los dos cuerpos giran alrededor de eso”.
Cook tiene la razón, ya que la Luna tiene una órbita estable alrededor del planeta. Desde hace al menos 4.5 mil millones de años, la fuerza gravitacional de la Tierra la jala hacia nosotros, pero sigue (y seguirá) extremadamente lejos de nosotros.
Por la relación gravitatoria que guardan ambos cuerpos, es prácticamente imposible que choquen entre sí. Tendría que haber un cambio significativo en la gravedad para que este ciclo se interrumpa o se modifique.
Entre la posibilidades, está la de un asteroide de dimensiones colosales impactando con el satélite y ocasonando que choque contra la Tierra. Efectivamente, solo un evento alteraría el equilibrio milentario entre nuestro planeta y su único satélite natural.
“Técnicamente, es posible que la Tierra y la Luna colisionen en un futuro muy lejano, pero es muy poco probable”, concluye la NASA.