Elegir un monitor no es cosa fácil, especialmente si somos usuarios exigentes que hacemos más de una cosa a la vez en nuestras computadora. Si tu plan es pedir de Navidad una nueva pantalla, te vamos a explicar por qué debes pedirle al Viejo Pascuero una de 27 pulgadas.
Jugar no es solo cosa de niños y los que pasamos ocho o más horas frente a la PC trabajando también merecemos tiempo de distracción y nada como un buen videojuego. Ahora, si vamos a utilizar un solo equipo tanto para cumplir con nuestras labores profesionales como para disfrutar un buen battle royale, hay varias razones por las que debes elegir uno de 27″.
Desde el sitio web de Computer Hoy recomiendan en un informe este tamaño de pantalla para los gamers de títulos competitivos. Además, es una medida ideal para dividir la pantalla a la hora de trabajar, entre Google Chrome y un editor de texto.
Eso es solo un ejemplo, pero también aplica para los que usan el navegador y herramientas de diseño, programas como Microsoft Excel, Zoom para reuniones, entre otros.
Además, una pantalla de 27″ garantiza paneles con una cobertura de color más amplia y tasas de refresco más elevadas. Los gamers buscan estos monitores por juegos con modo historia.
La resolución, una de las claves
Si bien hay de sobra en el mercado monitores de 1080p con 27 pulgadas, las resoluciones más elegidas para este tamaño de pantalla son 1440p y 2160p.
Otra opción son los QHD, que representan una mejora muy notoria comparado con Full HD. Una resolución de 1080 px ofrece aproximadamente dos millones de píxeles en pantalla, mientras que el 2,5K llega a los 3.6 millones de píxeles, unas 1,7 veces más.
Además, combinar 27 pulgadas con la tecnología QHD asegura una densidad casi perfecta de 108 ppp (píxeles por pulgada). Comparándolo con los 160 ppp de un monitor 4K de 27″, ofrece una experiencia de juego cómoda sin perder claridad, y por lo tanto, ideal.