El mundo en línea general, y Europa en particular, han vivido en los últimos años una considerable subida de la factura de la luz. ¿Tiene qué ver en algo la tecnología más novedosa, sobre todo los chips? Sí, en algo.
Aunque constantemente se culpe a los gobiernos de esto, también tiene su punto de responsabilidad el avance de la tecnología moderna.
Todos los componentes de las PC, laptops, televisores y otros productos electrónicos van mejorando su calidad, lo que inevitablemente influye en el consumo de energía eléctrica.
Como explica Hard Zone, en el caso de los chips, los más actuales tienen varias funciones al mismo tiempo, como procesar, transmitir y almacenar datos.
“Una buena parte del diseño de los procesadores es para traer la información a las unidades de ejecución, para que estas las procesen”, señala el portal especializado.
“El problema es que por las leyes de la física es más caro el transportar bits que cualquier otra cosa a día de hoy, y una de las consecuencias es que los chips suban la factura de la luz, al consumir más, obviamente”.
Así es el consumo energético de los chips, ¿cómo afectan la factura de la luz?
Bill Dally, científico jefe de NVIDIA, realizó un gráfico explicativo sobre el consumo energético de los chips en Joules por segundo (vatios). El consumo variará dependiendo de dónde se encuentren los datos:
Si está en los registros, 20 pJ (picoJoules) o 0.02 nJ (nanoJoules).Pero si hay que acceder a la caché para encontrarlos, sube a 50 pJ o 0.05 nJ.Si el dato se encuentra en la RAM, el consumo sube a 16 nJ o 16000 pJ.
En palabras de Hard Zone, acceder a la RAM tiene un coste mil veces superior en energía para realizar una misma operación que la información se encuentre en el procesador.
Las soluciones más cercanas para reducir la factura de luz aún están en desarrollo. Son la Near Memory Processing y la Processing in Memory.
Near Memory Processing es el procesamiento cercano a la memoria, mientras que la segunda, Processing in Memory (PIM) no son procesadores en sí mismos, sino chips de memoria con capacidades de procesamiento internas.